👏🏻👏🏻👏🏻Llegada a Santiago, fin de viaje.
Testimonio de Pablo Berenguer:
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“España🇪🇸🇪🇸🇪🇸.
Tierra de olivos, almendros, infinitos viñedos, encinas centenarias desde el sur al norte, inmensos bosques , eternas llanuras cultivadas de todo tipo de cereales y legumbres, castaños, robles, hayas, pinos, espesos maizales, arroyos, acequias y ríos que a todos acarician en algún momento de su lento transcurrir por nuestra diversa y hermosisima geografía...
Ahora he disfrutado como nunca pensé que podría hacerlo nuestros caminos, montañas, pueblos y ciudades...¡y a sus gentes!. El camino a Santiago me ha dado esa oportunidad y bendición. Nunca me cansaré de recordar éstos 40 días y 40 noches de mi particular éxodo.
Nuevamente y por última vez, agradecer a todos y cada uno de los que en alguna de las periódicas crónicas que mandé a nuestro impagable propagador de "cosicas del pueblo y alrededores" Jose Antonio Latorre ,los mensajes de ánimo y apoyo. Los he leído y releído todos regularmente. Es más, en ésos momentos en los que me sentaba al borde de un camino exhausto, a veces hasta pensando en tirar la toalla, ha sido leerlos y pegar un respingo, casi un salto en el aire y volver a emprender el camino con más fuerza y energía. Siento no haber podido contestar a ningúno de ellos, incluso de familiares y amigos íntimos de de la propia familia. Mil perdones.
Los últimos kilómetros han sido por la bellísima Galicia. Por Portomarin, un curioso pueblo que en los años sesenta del pasado siglo fue reconstruido en lo alto de su montaña circundante. La iglesia de San Nicolás fue desmontada piedra a piedra y vuelta a montar antes de inundar con un embalse y las aguas del río Miño lo que hasta ése momento era la localidad.
Palas de Rey , otro hermoso pueblo al que el antiquísimo Código Calixtino nombra ya como paso y parada obligatoria de peregrinos hacia Santiago. Antiguos restos de castillos y casas señoriales perduran aunque sean parcialmente en su termino.
En Arzua paso mi última noche antes de encarar la última etapa de cuarenta kilómetros hasta la ciudad santa, allí mi amigo Fernando de Santander me sorprende con su experiencia sobre los diversos caminos que ya ha hecho en múltiples ocasiones, otro tío excepcional que sabe lo que muchos otros no sobre la historia y tradiciones del recorrido.
Paso las dos últimas etapas junto a otro compañero extraordinario...Angel, un sargento de nuestro ejército, un tiarrón tan guapo y grande por fuera como por dentro 😉.
Mi héroe Carlos de Astorga, con heridas que nadie soportaría ha terminado el camino. Víctor, Aitor, Dani, Raquel, Sara, Beatrice, mis Javis, Roberto, Gabi, Roberto de Guatemala siempre a la par mía desde Astorga 😘...tantos y tantos nuevos amigos y conocidos que sé que alguno se quedará sin querer sin mentar pero para siempre en el recuerdo.
Mis hospitaleros Antonio de Tordesillas, D.Pedro de Villacañas, Jesús de Minaya, Manolo en el Provencio, Rebeca en Mota del Marqués, Pilar en Astorga y tantos otros.
Al final ayer llegué a Santiago de Compostela, a última hora recogí mi ansiada acreditación y pido perdón y permiso por y para no plasmar aquí las sensaciones y emoción desbordada , que cualquiera que haya entrado desde lo alto de la ciudad, desde el Monte do Gozo , ha sentido y sabe bien lo que es...
Eso sí, como bien tenía claro desde el principio , la virgen del perpetuo Socorro, San Andrés, los santicos de la Piedra y el escudo de nuestro pueblo son armas muy poderosas de las que acompañarse para abordar tamaña odisea.
El camino de verdad empieza a partir de éste momento para todo el que visita la tumba del apóstol...con la familia, con los amigos, con el trabajo, hasta con los desconocidos . El camino de verdadero se hace cada día al despertar...
¡¡ULTREIA ET SUSEIA!!
¡Buen camino!
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