Hoy es

Viejos Oficios “Ambulantes”

Bicicleta del lechero
Ya no vemos por nuestras calles a los “Aguadores”, viejos carreteros que hasta los años sesenta vendían el agua de puerta en puerta. Para ello tenían unos cántaros metálicos que les servía de medida y con los que llenaban las orzas y tinajas de las casas. Normalmente casi todos los “aguaores” de la comarca se abastecían de los Aljibes de Gasparito, en Rojales.

Tampoco vemos los carros de los chambileros, entre otros el del “Ceuta”, que hacían el helado de manera artesanal y que lo vendían por las calles.
¿Y el cuchillero? Vendedores de cuchillos y navajas solían venir de Albacete, Chinchilla o Almansa. Llevaban un arnés especial en su cintura cargado de una enorme variedad de artículos, que ofrecían al grito de “navajas de Albacete”.

Era fácil reconocer al lechero, con su bicicleta y sus dos recipientes de cinc con la medida de medio litro. Así vendían la leche fresca del día, aquella que nuestras madres hervían.
Me cuentan que existía el “botijero”, que ofrecía botijos y cazuelas de todos los tamaños; y el “Quincallero”
Afilaor
que llevaba en unas cestas tijeras, dedales, botones, bisutería…
Y los de la ropa fiá…
Mi padre era un vendedor de los de “fiao”. Cada semana llevaba en su bicicleta los encargos de ropa que le iban pagando poco a poco…Pero no era el único de su familia; su hermano “El Charles” era un fotógrafo ambulante que se recorría todas las fiestas de los pueblos. Si era Santa Águeda lo encontrabas en Catral, si eran los santicos de la piedra en Almoradí; y si era Pascua seguro que lo veías por el puente del río…


Aguaor
Ya apenas quedan ambulantes…

Aún encontramos al “afilaor”, al “arropiero”…y poco más. Son oficios que, muy pronto, desaparecerán para siempre.

Imprimir artículo

No hay comentarios :

Publicar un comentario

Si te pareció interesante, no olvides comentarlo y compartirlo en tus Redes Sociales. Gracias.