En las primeras décadas del pasado siglo se levantaron, bajo una concesión administrativa, los pilares de las conocidas viviendas de veraneo, en primera línea de la playa de Guardamar; un privilegio al alcance de muy pocos. Comenzaba así la moda de pasar el verano en la playa, un peregrinaje que muchos almoradidenses iniciaban al finalizar el colegio y que duraba hasta el inicio de éste (la mayoría volvían los días de Feria).
Aquello si que era un autentico veraneo.
ResponderEliminar