Admirada por unos y
menospreciada por otros, nuestra Iglesia es el bien patrimonial más importante
que conservamos en nuestro trazado histórico. Este es un hecho incuestionable que, más
allá de creencias religiosas o ideologías políticas, nos debe hacer
reflexionar.
Sin entrar a valorar su
profundo valor histórico (las primeras referencias a su existencia aparecen
tras la reconquista por parte
del Rey Jaime I en 1263), lo cierto es que guarda un gran Archivo documental, que comienza con los libros de Bautismos en 1574, y una importante colección de imágenes religiosas, adquiridas principalmente por particulares tras la guerra civil.
del Rey Jaime I en 1263), lo cierto es que guarda un gran Archivo documental, que comienza con los libros de Bautismos en 1574, y una importante colección de imágenes religiosas, adquiridas principalmente por particulares tras la guerra civil.
A excepción de alguna humilde y semiderruida vivienda que conservamos en la calle de La Reina, la Iglesia es el ÚNICO edificio
proyectado por Larramendi que se mantiene en pie, aunque eso sí, con continuas modificaciones
y pérdidas permitidas por la pasividad de todos, de las que ya os hablé AQUÍ
Según informe (inédito) de
Eugenio Fourdinier, el 28 de enero de 1835 la Iglesia “se hallaba en su
lado izquierdo concluida hasta la cornisa de donde ha de arrancar la bóveda principal; mas el lado derecho no
tiene mas altura que hasta las impostas de los arcos de las capillas”.
Sin embargo, no fue hasta
1861, treinta y dos años después del terremoto, cuando se publicó lo siguiente:
“Se ha colocado la última piedra de la elegante torre que corona el nuevo
templo de Almoradí (El Clamor Público- 19
de julio de 1861)”.
Un conocido Arquitecto
alicantino, Francisco Morell y Gómez, fue el encargado de las obras, que no
llegaron a terminarse completamente.
En la obra “España Mariana”
publicada en 1884 se aclara que “la
Iglesia dedicada al Apóstol San Andrés de Almoradí está sin
concluir una mitad, a la que le falta la techumbre”. Diez años después, y por
Real Orden del 21 de septiembre de 1894, se adjudica por parte de la Junta Diocesana en pública
subasta lo que parecen las obras definitivas de reparación extraordinaria.
Su compleja y costosa
construcción se alargó durante más de sesenta y cinco años.
Solo cuando conozcamos nuestra historia valoraremos lo que tenemos.
Víctor Rodríguez dijo:
ResponderEliminarDesandar lo andado es tarea ardua, cuando no imposible, pero el edificio, a mi juicio, y sobre todo en su aspecto exterior, ha vivido mejores momentos, desde su inicio neoclásico hasta el actual...
Roberto Cabrera Reina dijo: De acuerdo con lo que dice victor,claro que nuestra queridisima parroquia ,por lo menos para mi,ha vivido mejores tiempos,pero hagasmonos la pregunta de porque.No solo en su exterior ,!y del interior ni hablemos! Lo he dicho siempre y lo seguire diciendo "esta es la iglesia de las chapuzas"todo se ha echo predominando el gusto personal de los curas que han pasado sin ningun criterio artistico lo cual me parece aberrante....... Claro esta siempre con el cosentimiento de nuestras autoridades civiles que en ningun momento velaron ni siguen velando por el patrimonio mas importante que tenemos.Por tanto la culpa es nuestra por callarnos... claro esta que si algunos hablamos o somos malos o falta poco para que nos excomulguen porque aqui algunos son los que siempre tienen la razon..... Y los que lo hacen siempre tienen la razon y como suele ser normal nunca se equivocan......... Que penaa
ResponderEliminarPues sí, el Patrimonio debe conservarse para nuestros descendientes venideros, al margen de creencias y politiqueos. Y sobre todo, al margen de intereses económicos de políticos, constructores, y propietarios, esto es muy importante y desgraciadamente está a la orden del día.
ResponderEliminarPedro Mas.
La Iglesia si está declarada en el catálogo como bien cultural, Los párrocos no podrían hacer remodelaciones sin el visto bueno del Ayuntamiento (Por cierto la última remodelación de la iglesia en las escaleras laterales parece que se han hecho para impedir que las personas mayores no puedan ir a la iglesia), esta última remodelación parece que el parroco sea de los iluminati, o bien como la mayoria de la casta política española tienen que realizar obras antes de acabar la legislatura aunque sean obra inútiles.
ResponderEliminarTodo esto no habría pasado si el párroco hubiera sido D. José Rebello, puesto que este el dinero se lo hubiese gastado en los pobres y necesitados y no habria para obras.
Benedicto XVI
José A. Latorre
ResponderEliminarLa Iglesia pertenece al Patrimonio Ritual y es un BIEN INMUEBLE DE RELEVANCIA LOCAL.
Tiene la categoría de Monumento de Interés Local; GRADO: 1. Protección integral.
Y LAS SIGUIENTES PRESCRIPCIONES PARTICULARES: Deberá
mantener los elementos definitorios de la estructura
arquitectónica, su fachada con relieves, altura y
volumetría, así como el órgano.
LAS OBRAS PERMITIDAS SON: Conservación y restauración