En mis recuerdos queda un estrecho camino lleno de palmeras
que partía desde el campo de fútbol, no el actual, sino uno al que se accedía
por la calle Adrián Viudes (creo) y que más tarde sería engullido por lo que
hoy es el parque de la U.
Entonces no existía ninguna de las calles que ahora ocupan
lo que eran bancales y “regaeras” llenas de agrillo y regaliz.
¡Olores
perdidos!
Pues no lo vais a creer, resulta que al fondo de aquél
camino existía una vieja y enorme casa que yo siempre conocí deshabitada, pero
que durante una larga etapa de nuestra historia fue cuna del conocimiento y la
cultura de Almoradí.
Me cuentan que don Antonio Sequeros puso en marcha el Liceo Politécnico en 1946, y que bajo su dirección, impartían sus clases don Manuel
Valdés, don Manuel Pineda, don Daniel Míller, don Carlos Penalva…
Y sé que sus alumnos, todos, solo tienen buenos recuerdos y
agradecimiento a aquella etapa en la que, cargados con sus libros, enfilaban el
estrecho camino lleno de palmeras que comenzaba en la fábrica de hielo del
señor Viudes, un camino que marcaría sus vidas para siempre.
Hoy, si tenéis ocasión de pasear por detrás del campo de
fútbol, descubriréis un estrecho camino con alguna palmera, testigo mudo de una
época gloriosa.
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Jose Antonio Rodriguez Desde el antiguo campo de fútbol por un camino al margen izquierdo toda la parte trasera del compo fútbol se plantaba cañamo con dirección al Liceo y me acuerdo cuando llegábamos al liceo, el tío TOMAS donde vivía tenía palomeras y nos subíamos para fumarnos alguna Gramisa, que recuerdos,
ResponderEliminarPaqui Carrillo En los 80, en los días de Pascua, mí madre nos preparaba el capacico con la típica mona, el chocolate y un buen bocadillo y allá que nos íbamos todos los niños para el Liceo, de paso por el camino cogíamos "agrios" y lo pasábamos pipa, era como ir a los pinos a merendar. Qué tiempos aquellos!
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