Las Cofradías del Rosario son las precursoras de la celebración de la Resurrección del Señor con una procesión, el “encuentro”, que es -con toda probabilidad y junto a la de Domingo de Ramos- la más antigua de Almoradí y que representa el cierre perfecto de la Semana Santa, cuyo origen está, sin duda, en el propio nacimiento de la Cofradía.
Es el catolicismo triunfante representado por la Sagrada Eucaristía y la Virgen del Rosario, los que en público anuncian la alegría de la Resurrección. Para ello y en señal de duelo por la muerte de su Hijo, la Virgen del Rosario es cubierta por un fino velo y llevada en carrera por sus cofrades que, tras realizar tres reverencias, se detienen junto a la Custodia del Santísimo. Tras serle retirado el velo, entre volteos a gloria y música, se le coloca en el regazo la escultura de su Hijo.
Es el catolicismo triunfante representado por la Sagrada Eucaristía y la Virgen del Rosario, los que en público anuncian la alegría de la Resurrección. Para ello y en señal de duelo por la muerte de su Hijo, la Virgen del Rosario es cubierta por un fino velo y llevada en carrera por sus cofrades que, tras realizar tres reverencias, se detienen junto a la Custodia del Santísimo. Tras serle retirado el velo, entre volteos a gloria y música, se le coloca en el regazo la escultura de su Hijo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si te pareció interesante, no olvides comentarlo y compartirlo en tus Redes Sociales. Gracias.