Aunque desde tiempos medievales debió existir una imagen del santo para su adoración en el Altar Mayor de nuestra Iglesia, es en 1653 cuando se tiene confirmación de que se realizó nueva talla y se adquirieron en Murcia las andas necesarias para su salida procesional.
En la relación de 1779 se confirma la existencia de dos imágenes del patrón, la antigua con sus andas de, 1653, y una nueva "adquirida recientemente". Y Montesinos, por las mismas fechas, lo situaba en el camarín principal de la Capilla Mayor “alrededor del cual, en doradas repisas, están todos los Santos Apóstoles, sus compañeros...”, sin embargo, el Obispo Herrero ni siquiera lo nombra en su visita pastoral que realizó a la parroquia días antes del terremoto.
Ya no debió ocupar un lugar privilegiado en la reconstruida Iglesia, puesto que en la completa descripción de Altares de “España Mariana”, publicada en 1884, no aparece por ningún lado, ni tampoco está situado en el Presbiterio de la única imagen que se conserva anterior a la guerra civil.
Destruida en 1936, aunque no completamente, ya que pudo recuperarse la cabeza, se encargó a Ponsoda una nueva imagen a la que adaptó la referida cabeza, siendo bendecida el 29 de noviembre de 1940, cumpliéndose este año su 75 aniversario.
Si la comparamos con otras imágenes de nuestra Iglesia, y más tratándose del Patrón, puede parecernos minúscula, pero hay que entender que su tamaño tuvo que adecuarse al de la recuperada cabeza. De hecho, la hornacina donde se ubica tuvo que modificarse en 1956, haciéndola considerablemente más pequeña, y es que en el proyecto original del retablo el espacio destinado a San Andrés era mucho mayor, lo que hacía casi “perderse” al pobre Patrón.
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| La talla presidiendo excepcionalmente el altar mayor unos dias antes de su fiesta con motivo del 75 aniversario de la imagen (1940 - 2015) |
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